Pionera de la marioneta cubana, fundadora del Guiñol Nacional de Cuba (1963
Pionera de la marioneta cubana junto con su hermano Pepe. Comenzó su carrera en el teatro de títeres a una edad muy temprana, creando su propio grupo de teatro de títeres itinerante en 1949 utilizando títeres hechos de tela y posteriormente de papel maché. Se presentaba en fiestas infantiles en casas particulares y escuelas, pidiendo el dinero justo para cubrir sus gastos de transporte. En 1950 fue contratada por Misiones Culturales y realizó giras con sus títeres por toda Cuba. De regreso a La Habana, alquiló un local, presentando programas los fines de semana y de vez en cuando en la televisión cubana .
En 1952 creció el interés por los títeres, especialmente en La Habana. En Mayarí (Este), otro titiritero, Pepe Carril, fundó el Teatro de Muñecos. En 1956, los Camejo y Pepe Carril se unen, dando origen al Guiñol Nacional de Cuba (Teatro Nacional de Marionetas de Cuba). Su objetivo declarado era reagrupar a todos los titiriteros y consolidar un movimiento para promover la cultura y las tradiciones cubanas. Vieron los títeres no solo como un medio para entretener a los niños, sino como una forma de arte con infinitas posibilidades que podría interesar a todos.
En 1959, la Revolución Cubana provocó enormes cambios en el panorama político y cultural del país. Este período vio la creación del Consejo Nacional de Cultura (Consejo Nacional de Cultura) y el Departamento Nacional del Teatro para la Infancia y la Juventud (Dirección Nacional de Teatro para Niños y Jóvenes). Con el movimiento “Títeres en Parques y Escuelas”, los títeres se han multiplicado en toda Cuba. Donando su experiencia, los Camejo organizan talleres y seminarios con el objetivo de capacitar a maestros, trabajadores culturales y otros candidatos en todo el país.
A lo largo de su carrera, los Camejo han realizado ellos mismos todas las tareas en la creación de sus producciones. Adaptaron textos existentes para el teatro de títeres ( Federico García Lorca , Javier Villafañe ), y exploraron otras fuentes, como el folclore afrocubano, para crear nuevas obras para niños y adultos. Sus producciones infantiles más importantes son: Pelusín y los Pájaros (Pélusin and the Birds, 1956), La Cenicienta(Cenicienta, 1965) e Ibeyi aña (1969); y para adultos: Don Juan Tenerio (1965), Shango de Ima (1965), La Celestina (1967), yYo, o Vladimiro Mayakovsky (Yo o Vladimir Mayakovsky, 1970). Estaban en el origen de todos los aspectos de sus producciones, incluida la fabricación de sus marionetas que manipulaban y cuyas voces creaban.
En 1971, luego de las sesiones del Primer Congreso Nacional de Educación y Cultura realizado en La Habana, fueron destituidos como directores artísticos del Teatro Nacional de Guignol (TNG, Teatro Nacional de Guignol), fundado en 1963) víctimas de prejuicios morales y políticos. , tras un juicio que se denominó » parametración «. En la década de 1980, Carucha y Pepe fueron enviados al exilio, ambos fallecieron en Estados Unidos. Su legado, la memoria de su trabajo con Pepe Carril en TNG, es constantemente revisado por nuevas generaciones de artistas teatrales en un esfuerzo por rehabilitar sus nombres, sus talentos y sus obras.
Información escrita en la WEPA por Pablo Luciano Medina(2014) y
Norge Espinosa Mendoza(2014)